sabato 15 gennaio 2011

Tintín en Camboya



  Siempre que se habla de genocidio, de exterminio de población,... aparece en la mente la imagen de los nazis, imagen unida al pensamiento de la frialdad en la optimización de los mecanismos de la muerte masiva. Quizás sea por proximidad geográfica, quizás sea incluso por proximidad cultural,... Han existido otros genocidios de gran envergadura, algunos convenientemente tapados al no haber habido ganadores ni vencidos, por lo menos de manera violenta (URSS), otros no considerados quizás por lejanía tanto cultural como geográfica: Los Jemeres Rojos. (Aunque también pudieran haber razones político-geográficas de peso para no dar importancia a unas cosas más que a otras en el seno de las grandes organizaciones mundiales. Equilibrios,...)

   El 17 de abril de 1975, después de cinco años de guerra civil, llega al poder de Camboya Pol Pot, instaurando una dictadura comunista que colectiviza todo el país, desaparece "el dinero" en tan sólo dos meses. La primera medida fue el desalojo de 3 millones de habitantes de las ciudades, que pasaron a tareas de campo.

  Pol Pot, al igual que el Gran Hermano orwelliano, prometía un futuro esplendoroso, con aumentos de la producción de arroz que triplicaría la actual (en 1984 era el chocolate lo que aumentaba su producción incesantemente). Se llegaron a implantar jornadas de 18 horas de trabajo para conseguir este objetivo. Sin embargo, las cosechas de arroz cayeron en picado, ya que el régimen había desterrado la tecnología, tan sólo valía el trabajo humano, había sustituido ésta por la "educación política". El hambre, se hace con el país. El país, se convertía en una masa de esclavos...

  Al igual que la cosecha de arroz, los valores humanos también cayeron en picado: la familia es un obstáculo al poder del Partido, por lo que éstas eran separadas, se proclamaba la renuncia a los sentimientos de piedad y amistad, los niños espiaban a sus padres en busca de traiciones al Partido, los muertos (desaparecidos) podían llegar a ser usados como abono en los campos, las torturas eran habituales (en ocasiones, para ahorrar balas, se torturaba hasta la muerte).

  En tres años y ocho meses de régimen, murieron dos millones de personas en un país de ocho millones. En enero de 1979, Vietnam invade Camboya y Pol Pot cae.

  Así me lo explicó Tintín, a su regreso de ese viaje a Camboya que nunca hizo...



podi-. 

1 commento:

  1. Jo he estat dues vegades en els centres de detenció propers a Pohm Penh. L' última en el 2009.Vàrem poder parlar amb una de les persones que anava a declarar com a testimoni en el curs del judici contra els kheners rojos.
    Tan sols la barbarie nazi s' assimila al quwe va passar a Cambodja el segle passat.

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